A lo largo de todos estos años senti que vivi una vida que parecían mil vidas juntas.

He visto flamencos en las puna, lagunas de colores escondidas, termas naturales en pleno cordón montañoso.

Tuve la suerte de que se me apareciera un huemul, ver un oso caminar con su cría, presenciar una manada de pumas, nadar y ver perlas en la ostras. La naturaleza en su máxima expresión.

He vivido con gente que habla otro idioma, he vivido afuera por mucho tiempo sin volver a mi país.

He vuelto. He recorrido desde La Quiaca hasta Ushuaia un año viviendo en van. He cumplido infinitos sueños y me quedan infinitos más por cumplir porque para soñar no existe el tiempo, ni la edad.

He escalado montañas, he nadado en playas desoladas.

He vivido también en una península, donde podía ver dos tipos de mares, y por ende, el amanecer y el atardecer.

Me he despertado de madrugada varias

veces para esperar salir el sol.

He visto lluvias de estrellas.

He dicho te amo muchas veces y sigo amando profundamente.

Vi paisajes que me hicieron llorar y también vi personas llorar por el paisaje.

He visto personas y hasta comunidades vivir en los lugares más locos: selvas, islas en los salares, el desierto.

Estuve una vez en el acuario del mundo.

He viajado al Círculo Polar Ártico y he tenido el privilegio de ver auroras boreales.

Ya perdí la cuenta de la cantidad de cuadernos que escribí.

También tuve la oportunidad de ver dos eclipses de luna totales.

Lo he sentido todo.

Me perdí, me busqué, me encontré.

El cambio me ha llevado al crecimiento y puedo honrar y entender cada faceta de mi persona: la de la playa, la de la montaña, la universitaria, la de oficina, de la vida al aire libre, la de dormir en una camioneta, la que tiene todas las comodidades, etc.

Vivir una vida que parecieran mil vidas te hace sentir que a veces hay cosas que parecen tan cercanas… y otras que parecieran de otra vida.

Pero así lo prefiero, porque el caminar por todos estos senderos me trajeron a mí. No fue lineal y ni siquiera siguió un tiempo de calendarios.

Porque si tenemos la posibilidad de elegir, que la intuición sea la brújula.

Que puedas escribir tu propia historia.

Que puedas vivir una vida que parezcan mil vidas, porque lo intentaste, te equivocaste, te arriesgaste y te alineaste a vos mismo.

Porque pudiste honrar tu paso por este mundo y dar una contribución mas grande a la propia individualidad.

Porque pudiste hacer valer cada segundo de nuestra existencia.